Si esta afección se deja sin tratar, la uña enterrada puede ir a más, produciéndose una infección o inclusive un absceso que requerirá de tratamiento quirúrgico. La osteomielitis es una complicación en la que el hueso se infecta, aunque no es muy habitual en un dedo del pie infectado.
Los uñeros o unas enterradas son más frecuentes en adolescentes y adultos, y menos comunes en bebés y en niños. Esta dolencia la suele padecer más los hombres que las mujeres y los que comprenden la edad entre veinte y treinta años, son los que más riesgo tienen.
Cualquiera de las uñas del pie puede encarnarse, pero la condición se desarrolla normalmente en la uña del dedo gordo del pie.
Causas de la uña encarnada o uñero
- Los zapatos ajustados o tacones altos producen que los dedos se opriman y de esta manera presionen la uña haciendo que crezca de forma anormal.
- Cortar las uñas de manera incorrecta puede producir que los bordes de la uña se introduzcan en la piel. La manera correcta de cortar las uñas es en línea recta, no redondeada.
- Los trastornos como infecciones por hongos en las uñas pueden originar una uña engrosada o amplia en su desarrollo.
- Cualquier cosa que ocasione que la uña se lastime repetitivamente, como jugar al futbol, o cualquier lesión aguda cerca de la uña lesión aguda cerca de la uña, también puede ser la causa de un uñero o uña encarnada.
- Si algún miembro de tu familia padece de uñas encarnadas, entonces tendrás más posibilidades de desarrollarla también. Algunas personas tienen las uñas más redondeadas que otras o el hueso subyacente puede estar más "hacia arriba", lo que incrementa la posibilidad del desarrollo de la uña encarnada.
Uñas encarnadas o uñero, síntomas y signos
Las uñas encarnadas es una alteración usual que atañe con mayor asiduidad el borde exterior del dedo gordo del pie. Pero también, se puede producir en cualquier otro dedo e incluso en los dos lados de un dedo del pie, puede encarnarse. Los síntomas y signos más frecuentes suelen ser hinchazón, enrojecimiento y dolor en la esquina de la uña del pie.
En el comienzo del trascurso de un uñero o uña encarnada, el final de la punta del pie se vuelve rojo y doloroso, con leve hinchazón. No hay drenaje o pus. Puede notarse caliente al tacto, pero no tendrás fiebre.
Más tarde, la piel y el tejido extra crecerá alrededor de la punta afilada de la uña y puede empezar a salir un drenaje de color amarillento.
Esto es la respuesta del cuerpo al trauma de la uña irritando la piel y no necesariamente es una infección.
Algunas veces, se puede desarrollar una infección. En tal caso, la hinchazón empeora, y puede haber drenaje blanco o de color amarillo (pus) en el área. Un área de color más claro en la piel puede estar rodeada de piel enrojecida. En este caso puedes tener fiebre, aunque es poco común.
Cuándo se debe buscar atención médica
En el momento en que una uña encarnada o uñas enterradas desarrolla una infección (drenaje, fiebre, piel más clara rodeado de enrojecimiento de la piel, o empeoramiento de dolor e hinchazón), consulta a un médico.
Incluso si la uña del pie encarnada está sólo inflamada sin infección, consulta a un médico si también se producen las siguientes condiciones:
- Si han pasado más de cinco años desde la última vacuna del tétanos.
- Si no hay mejoría después de tres días utilizando remedios caseros.
- Si tienes diabetes, mala circulación, SIDA, si estás en quimioterapia, o tienes otro motivo de mala cicatrización o un mayor riesgo de infección.
La mayoría de las uñas encarnadas pueden ser tratadas en el consultorio del médico. Sin embargo, ir al servicio de urgencias (en coche, no ambulancia), si estas circunstancias se desarrollan:
Si tienes diabetes o estás en mayor riesgo de infección y tu médico de cabecera no está disponible (incluso si la punta no está infectada aún).
Si tienes diabetes o estás en mayor riesgo de infección y tienes fiebre o signos de infección en el dedo del pie (tanto las infecciones bacterianas como por hongos son más frecuentes en personas inmunodeprimidas).
El diagnóstico de una uña encarnada o uñas enterradas
El médico decidirá si hay una infección presente o no, y la agresividad para tratarla.
El médico evaluará la uña encarnada preguntando cómo se desarrolló el problema (en caso de cualquier lesión, cuando empezó) y sobre otros problemas médicos, medicamentos, alergias, y la más reciente vacunación contra el tétanos.
Un examen físico incluirá control de la temperatura, el pulso y la presión arterial, un examen detallado de los pies, las uñas y los ganglios linfáticos de la ingle, y posiblemente una radiografía del pie.
Los análisis de sangre se pueden realizar si se tiene una infección severa o antecedente de diabetes.
Remedios caseros para las uñas enterradas
Si hace poco del desarrollo de la uña encarnada, a continuación te detallo unos remedios caseros para las uñas encarnadas, que pueden tener éxito en la prevención de la necesidad de cirugía.
- Remojar los pies en agua tibia cuatro veces al día. No es necesario añadir jabón, sales o agentes antibacterianos al agua.
- Lavar los pies, incluyendo el área afectada, dos veces al día con agua y jabón. Mantener el pie limpio y seco durante el resto del día.
- No usar tacones altos o zapatos ajustados. Considerar la posibilidad de usar sandalias, si es posible, hasta que la situación se aclare.
- Trata de levantar la esquina de la uña que está cavando en la piel. Toma un pedazo pequeño de algodón o gasa y rueda entre tus dedos para formar un pequeño rollo. A continuación, coloca el rollo entre la uña y la piel para mantenerla elevada. Esto es doloroso, pero es la parte más importante del tratamiento casero. Después de cada inmersión, trata de empujar el rollo un poco más adentro Cambia el rollo todos los días. Esto puede llevar de siete a 15 días para que la uña crezca fuera de modo que no meter en la piel por más tiempo.
Si no ves ninguna mejoría en tres días, llama a tu doctor.
