Remedios caseros para la conjuntivitis | Tratar la conjuntivitis con hierbas
Que es la conjuntivitis | Tratamiento eficaz para la conjuntivitis
La conjuntiva es una fina película transparente que cubre la parte blanca de los ojos, así como el interior de los párpados. La condición llamada conjuntivitis es causada cuando la película delgada se inflama.
Este tipo de inflamación puede causar dolor, picazón, secreción, lagrimeo y enrojecimiento del ojo. Esta condición puede ser causada por una infección viral o bacteriana, así como una tensión excesiva en los ojos.
Algunos de los síntomas de esta condición incluyen hinchazón leve y lagrimeo de los ojos, un claro drenaje fino en los ojos, una constante sensación de que algo se pega a los ojos, ardor o sensación de picazón en los ojos y los párpados están pegados al despertar por la mañana.
Esta condición es muy contagiosa y puede transmitirse a través del contacto directo con una persona infectada.
Dieta fácil y consejos para la conjuntivitis
Sin embargo, hay varios remedios caseros para tratar esta condición. El jugo de ciertas verduras como la espinaca y la zanahoria son conocidos por ser excelentes para esta condición.
Mezcla el jugo de espinacas (200 ml) y el jugo de zanahoria (300 ml) y bebe una o dos veces al día. El jugo de perejil (aproximadamente 200 ml) también se puede mezclar con el jugo de zanahoria para tratar la conjuntivitis. Se ha demostrado que es igualmente beneficioso.
Otro remedio muy eficaz son los fomentos de agua fría. Este procedimiento consiste en sumergir un trozo de tela limpia o gasa en un recipiente con agua helada.
Escurre el exceso de líquido del paño y colócalo sobre los ojos. Una vez que la tela se calienta, la mojas en el agua otra vez. Esto debe hacerse durante unos 30 minutos todos los días, ya que calmará los ojos y acelerará la curación.
Aumenta el consumo de vitamina A y vitamina B2. Estas han demostrado ser útiles para esta enfermedad. Las papayas, mangos, tomates, calabaza, zanahorias, mantequilla y yogur son fuentes de vitamina A, mientras que las verduras de hoja verde, tomates, cítricos, almendras y la leche son buenas fuentes de vitamina B2.
La dieta que mantengas mientras tienes esta infección también es importante. La forma más prudente de tratar esta condición es ceñirse a una dieta de frutas. Tres de tus comidas en un día debe consistir sólo en frutas.
No obstante, no incluyas plátanos en este régimen dietético. Los alimentos azucarados y con almidón deben ser evitados. La cafeína, mermeladas, postres, cereales refinados, pan blanco, patatas, carnes, dulces y demasiada sal, todos deben ser excluidos de la dieta.
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