En función de la articulación afectada, las personas pueden experimentar síntomas diferentes. Algunos de los signos y síntomas comunes incluyen dolor, rigidez, hinchazón, enrojecimiento y dificultad para usar la articulación afectada.
Cualquier persona puede desarrollar bursitis, pero ciertos factores pueden aumentar el riesgo incluyendo el envejecimiento y un trabajo o pasatiempo que requiere movimientos repetitivos o presión en particular en las bursas.
La bursitis puede ser un signo de tomarlo con calma y descansar el cuerpo para reducir el dolor y la hinchazón. En la mayoría de los casos, desaparece por sí sola en una o dos semanas con un descanso adecuado.
De hecho, el descanso es la primera línea de tratamiento para ayudar a la zona lesionada o inflamada a sanar. Algunos remedios caseros también ayudan a aliviar el dolor, el tratamiento de la enfermedad y prevenir brotes recurrentes.
Sin embargo, busca ayuda médica si experimentas hinchazón excesiva, dolor agudo o fiebre.
Como tratar la bursitis con remedios caseros
Compresas frías
Cuando se trata de inflamación y dolor debido a la bursitis, las compresas frías son un buen remedio. La temperatura fría ayuda a reducir la hinchazón inicial y reduce el dolor porque adormece la zona afectada. También ayuda a reducir el dolor y la inflamación.
Las compresas frías suelen ser más eficaces cuando se utilizan dentro de 24 a 48 horas del desarrollo de la bursitis.
* Envuelve unos cubitos de hielo en una toalla delgada.
* Coloca la bolsa de hielo suavemente sobre la articulación afectada durante unos 15 minutos.
* Después de retirarla, eleve la articulación por encima del corazón y descansa.
* Repite varias veces al día hasta que llegue el alivio.
Precaución: No apliques el hielo directamente sobre la piel, ya que puede causar congelación.
Compresas calientes
Después de 48 horas para la bursitis aguda o en cualquier momento de la bursitis crónica, las compresas calientes son muy útiles. Ayudan a mejorar el flujo sanguíneo a la articulación afectada, reducir la rigidez y combatir la inflamación.
* Humedece una toalla fina con agua caliente (no hirviendo) de agua.
* Aplica en la zona afectada durante 15 a 20 minutos.
* Repite varias veces al día.
También puedes usar una bolsa de agua caliente o una almohadilla térmica en lugar de una compresa caliente. Puedes incluso lavar el área afectada con agua caliente.
Masaje
El masaje ayuda a reducir las molestias de una articulación inflamada. Mejora la circulación y reduce la hinchazón y la rigidez. También te ayuda a relajarte.
Puedes hacer el masaje por ti mismo o que lo haga un experto.
* Calienta un poco de aceite de oliva, coco, sésamo o aceite de mostaza.
* Aplica el aceite caliente sobre la zona afectada.
* Masajea con presión suave pero firme durante 10 minutos.
* Pon una toalla caliente sobre la zona afectada.
* Repite varias veces al día hasta que tu condición mejore.
Advertencia: Evita el masaje si la infección es la causa de tu bursitis.
Aceite de ricino
El aceite de ricino es otro remedio eficaz para reducir el dolor y la hinchazón en las articulaciones. El ácido ricinoleico en el aceite de ricino tiene propiedades anti-inflamatorias que ayudan a aliviar el dolor y reducir al mínimo la inflamación. Incluso ayuda a mejorar la movilidad de la articulación.
* Remoja un pedazo de franela de lana en aceite de ricino prensado en frío.
* Ponlo en la articulación afectada y cúbrela con una envoltura de plástico.
* Coloca una almohadilla eléctrica o bolsa de agua caliente sobre ella y cubre con una toalla vieja.
* Deja actuar durante 30 a 40 minutos, y luego retírala.
* Frota suavemente el residuo aceitoso de la piel o enjuaga con agua tibia.
* Utiliza este tratamiento 3 o 4 veces a la semana.
Jengibre para tratar la bursitis
El jengibre es un analgésico natural, que puede ayudar a reducir el dolor y las molestias de la bursitis. También contiene cualidades anti-inflamatorias y analgésicas similares a la aspirina o ibuprofeno. Además, mejora la circulación promoviendo la curación rápida.
* Envuelve 3 a 4 cucharadas de jengibre fresco rallado en un pedazo de gasa y átalo con fuerza. Pon esto en agua caliente durante 30 segundos. Deja que se enfríe, y luego colócalo en la articulación afectada durante 10 minutos. Haz esto 2 o 3 veces al día.
* Otra opción es masajear el área afectada con aceite de jengibre un par de veces al día.
* También puedes hervir 1 cucharada de jengibre en rodajas en 2 tazas de agua. Hierve durante 10 minutos. Cuela, agrega miel cruda para el gusto y bebe 2 o 3 veces al día.
Vinagre de manzana
El vinagre de manzana es otro remedio de uso común para la bursitis. Ayuda a restaurar la alcalinidad del cuerpo, que a su vez reduce la inflamación.
Además, los minerales como el magnesio, el calcio, el potasio y el fósforo en el vinagre de manzana ayudan a equilibrar los fluidos.
* Remoja una toalla fina en vinagre de manzana crudo sin filtrar y utilízalo para envolver el área afectada durante varias horas al día.
* Además, mezcla 1 cucharada de vinagre de manzana crudo sin filtrar y un poco de miel cruda en un vaso de agua. Bebe este tónico dos veces al día durante unos días.
Cúrcuma para tratar la bursitis
El pigmento amarillo llamado curcumina en la cúrcuma es un agente anti-inflamatorio muy eficaz. Por lo tanto, la cúrcuma es excelente para reducir el dolor, la hinchazón y la inflamación. Se puede tratar tanto el dolor articular agudo como crónico.
* Hierve 1 cucharadita de cúrcuma en polvo en un vaso de leche. Añade un poco de miel cruda y bebe dos veces al día durante al menos unos días.
* Otra opción es tomar un suplemento de curcumina al día después de consultar a tu médico.
Advertencia: Evita el consumo excesivo de cúrcuma, ya que puede interferir con ciertos medicamentos, como anticoagulantes.
Corteza de sauce blanco para la bursitis
Los expertos en hierbas sugieren el uso de s corteza de sauce blanco para aliviar la bursitis. Un compuesto conocido como salicina en esta hierba funciona como un analgésico natural. También ayuda a reducir la inflamación y la hinchazón.
* Agrega ½ cucharadita de corteza de sauce blanco seca a una taza de agua hirviendo. Tapa, dejar reposar durante 15 minutos y cuela. Bebe esta infusión 2 veces al día.
* Otra opción es tomar un suplemento de corteza de sauce blanco todos los días después de consultar a tu médico.
Advertencia: Esta hierba no es adecuada para niños, ni para personas que toman medicamentos anticoagulantes.
Leche de magnesia para la bursitis
La leche de magnesia puede combatir la inflamación y el dolor en las articulaciones. Siendo rica en magnesio, es una sustancia anti-inflamatoria y anti-artrítica, que puede reducir la inflamación en el cuerpo.
* Toma 1 cucharadita de leche de magnesia con un vaso de agua dos veces al día durante una semana.
* También, incluye alimentos ricos en magnesio en tu dieta, como verduras de hojas oscuras, plátanos, frijoles, lentejas y avena.
* Otra opción es tomar un suplemento de magnesio después de consultar a tu médico.
Consejos adicionales para la bursitis
* Descansa la zona afectada durante unos días para la recuperación rápida.
* Prueba la terapia de acupuntura para ayudar a reducir la hinchazón y la inflamación.
* Para aliviar el dolor y reducir la inflamación, incluye alimentos anti-inflamatorios en tu dieta.
* Amortigua la articulación afectada con una pequeña almohada mientras duermes.
* Evitar la aplicación de cualquier tipo de presión sobre la articulación afectada.
* Evite estar sentado o de pie durante períodos prolongados de tiempo. Toma descansos frecuentes y camina.
* Esfuérzate por mantener un peso saludable para evitar el estrés en las articulaciones.
* Realiza ejercicios de fortalecimiento para mantener las articulaciones y los músculos sanos.
* Haz calentamiento y ejercicios de estiramiento antes de realizar actividades extenuantes para proteger tus articulaciones de una lesión.
* La vitamina C es un nutriente maravilloso para la prevención y curación de lesiones en las articulaciones. Consume alimentos ricos en vitamina C o toma un suplemento después de consultar a tu médico.
FIN
Como tratar la bursitis con remedios caseros
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